Capítulo anterior:
- No hombre, solo lo mantendríamos en secreto durante un tiempo, hasta que lo nuestro se estabilice y lo de Malik se enfríe.
- Entonces, ¿lo nuestro va enserio?
- Tan enserio como mis rizos.
Y dicho esto nos acercamos para sellar nuestro “nosotros” con un beso más de nuestra pequeña colección.
Capítulo 34:
Desde ese instante, Harry y yo empezamos el primer capítulo de nuestro romance, y aunque era un secreto entre él y yo, se sentía inmensamente bien saber que él me quería y estaba allí para mi. Cómo no me veía con fuerzas de volver y encararme con mi padre, por el momento Sam me había adoptado en su casa con una gran sonrisa. Liam, como mi buen mejor amigo, se había encargado de ir a buscas a mi casa todo lo necesario para aguantar durante unas semanas. Constantemente me encontraba con llamadas perdidas de mi padre, a las que no contestaba i tampoco devolvía. Si de verdad quería recuperarme que fuera a buscarme y luchara por mi. En esas semanas, Harry se escapaba constantemente del trabajo para ir a verme a casa de Sam, por esa misma razón, mi rubia amiga fue la primera en enterarse de mi relación con el rizitos. No le hizo mucha gracia al principio, por qué tampoco es que se llevaran tan bien, o confiara mucho en él, pero como buena amiga lo había aceptado y me había apoyado. A veces iba a visitarlos a todos los chicos, cosa que me encantaba pero a la vez era un poco extraño. Extraño no poder abrazar y besar a Harry teniéndolo a mi lado, extraño por qué Zayn y yo nos habíamos unido mucho, extraño por que Niall parecía molesto. Por eso mismo, el sábado decidí cortar con todo aquello y hablarle para sacar agua clara.
- Niall, ¿se puede saber que problema tienes conmigo?
- Ahora no Carol.
- ¿Y entonces cuando?
- Vamos a un lugar más tranquilo.
Nos fuimos él y yo solos a la terraza. El estaba sentado enfrente mío con la mirada perdida en el horizonte. Yo lo observaba atentamente, y allí fue cuando vi el indicio de tristeza en sus hermosos ojos azules.
- Hey, ¿estás bien?
- Perfectamente...
Solo con oír como se le quebraba la voz, supe que tenía que hacer. Me levanté y sin decir nada lo abracé lo más fuerte que pude. No quería que mi Nialler se sintiera mal. El era especial para mi. Era como mi niño.
- Es Sam, Carol... no quiere saber nada de mi...
- Eso no es verdad pequeño, a ella le gustas.
- ¿Y por qué no responde mis llamadas? ¿Por qué me ha borrado del facebook? ¿Por qué me ha dado unfollow?
Allí todo encajó, Sam había estado un poco rara en lo que concierne a los chicos, no quería que me enamorara muy rápido de Harry y después él me dejara por otra. No me acompañaba a verles, y no me había vuelto a hablar de Niall, cuando lo suyo parecía especial.
- Niall, te prometo que averiguaré que pasa con ella, pero por favor... no la tomes conmigo, yo te quiero muchichísimo!
- Lo siento, es que... no quería encapricharme de nadie así, y ella es especial... pero...
- Shhh tranquilo.
Y lo volví a abrazar, con fuerza, con dulzura. Hasta que la voz de Harry irrumpió en mis pensamientos.
- Ejem, Carol, ¿te llevo a casa?
- Claro. Prométeme que estarás bien mientras yo no esté aquí Nialler, o llamaré a una niñera.
- Te lo prometo princesa.
Y dicho esto me despedí de los demás y me fui con Harry de camino a casa.