Capítulo anterior:
Pregunté a Niall en un mensaje si a Zayn no le importaría y la respuesta me tranquilizó.
“Que va, el quiere que vengas tanto como los demás, te hecha de menos. Un beso enorme”.
Bien, ahora solo faltaba llamar a Sam para irnos de concierto y contar con la aprobación de mi padre. Challenge accepted.
Capítulo 28:
La respuesta de Sam fue positiva al cien por cien mientras que la de mi padre fue bastante dudosa. Lo acabé convenciendo con distintas promesas sobre los estudios que me tendría que dedicar a cumplir. Mi dulce amiga llego a media tarde con toda la tarea echa y con la única preocupación de la ropa que íbamos a utilizar. Nos decantamos por ir monas pero cómodas, nada de tacones ni vestidos despampanantes. Pantalones ajustados y camisetas para ir de fiesta. Intentaba no pensar en como me tratarían Zayn y Harry. Todo era una locura, pero sentía que vivía el sueño. A mi siempre me habían encantado y sentir que podía asistir a un concierto me llenaba de felicidad. Aunque la duda volvió al sacar el tema Samanta.
- Carolina, ¿que vas a hacer con Zayn?
- ¿Que quieres que haga?
- No se, es tu ex...
- Nunca llegamos a salir seriamente.
- Bueno pero, vas a ir a por Harry, ¿o no?
- No voy a ir a por nadie ¿entendido?
- Ah ya se, te gustó Lucas, ¿verdad?
- ¿Lucas?
- Nuestro amigo, ya sabes.
- Ah! Nah, nah, es mono pero no se...
- Te vuelve a gustar Harry.
- Nunca me ha dejado de gustar.
Vale, perfecto, me acababa de delatar delante de mi mejor amiga, había intentado evitar que mi preferencia por el chico de cabello rizado se destapara pero ahora ya no podía evitarlo. Había tocado fondo.
- Ya lo decía yo. Ve por el, se feliz.
- ¿Y Zayn? No pienso ser una zorra que va con uno y cuando se cansa va con otro.
- Pero tu no eres así, además... todavía no me contaste que hiciste ayer con Harry...
- Nada, no hicimos nada.
- Sosa.
- Oye, el no quiere nada conmigo y yo nada con el, se acabó la discusión.
Aquí terminó la conversación sobre mis amores, si era un tema que no me gustaba tocar. Seguimos hablando de cosas más insignificantes que no me metieran en apuros, hasta que llegó la hora de irnos hacia el concierto. No tardamos en llegar, era un gran recinto cerrado, que se distinguía desde lejos debido a las luces que emanaba aquella gigantesca carpa con el cartel de los chicos en la parte superior. Sonreí instintivamente al ver a Harry entre ellos mientras Sam murmuraba la gran cantidad de chicas jóvenes, dulces y guapas que nos hacían la competencia.
- ¡Pasarlo bien chicas!
- Gracias papa, te quiero.
Así nos despedimos de el, mientras nos dirigíamos a paso rápido hasta la puerta trasera en la que podíamos acceder al backstage. recibimos unas entradas especiales con los que pudimos entrar hacia los camerinos de la banda. Traje mi cámara, con la que hice fotos sin parar a esa experiencia que surgía y iba tomando forma por momentos. Tuvimos que pasar diversos controles, reconocí a algunos de los guardaespaldas de los que no me había aprendido el nombre aún, Sam sonreía, antes le podrían haber importado un pimiento pero desde que le conté que Niall quería verla su emoción salía disparada de su sonrisa infinita. Nos llevaron hacia un camerino en el que llevaba escrito “ One Direction” tomé aire varias veces, vi como Sam, que perdía los nervios por momentos, soltó de un bufido todo su aire y abrió la puerta con descaro. Sin ni siquiera llamar, pero no puedo negarme a que lo que nos encontramos al otro lado fue una vista espléndida.
- ¡Llegamos!
Gritó mi rubia amiga dejando balancear su larga coleta. Dentro estaban los chicos, cambiándose, y con eso me refiero a sin camisetas, y alguno sin pantalones.
- Dios, lo siento no era nuestra intención interrumpir.
Dije bajando la mirada al suelo, nerviosa por esa incómoda situación.
- No tengáis vergüenza anda, ¡hay confianza!
Sin duda Louis era un sol, pero no pude decir nada más por que un Zayn sin camiseta y en boxers se acercó y me apretujó entre sus brazos en un cálido abrazo. Sonreí al ver que no me guardaba rencor y lo abracé con ternura. Después saludé a los demás dejando a Harry para el final, me besó en la mejilla y me susurró cerca del oído que estaba preciosa. Me sonrojé y cambié de tema para disimularlo.
- Bueno chicos, gracias por invitarnos.
Sam se había auto marginado en una esquina mientras hablaba plácidamente con el duendecillo, mientras los demás chicos me preguntaban por todas las novedades de mi vida social. Liam me rodeó con los brazos y me invitó a sentarme en su regazo, mintras yo sonreía por la cara de tonto que se le quedaba a Harry y mientras me maldecía a mi misma por la tristeza reflejada en los ojos de Zayn.
Pronto nos echaron del cuarto los agentes, debían seguirse preparando, mientras esperábamos en nuestros asientos, Sam me contaba lo dulce que era Niall con ella, suerte tenía. Las luces se apagaron para dar comienzo al espectáculo, el concierto fue jodidamente perfecto, justo como ellos. Canté dejándome la voz todas sus canciones, y no pude evitar sentirme celosa cuando Niall, en la canción de “Everything about you” hizo referencia a la chica rubio de ojos azules sentada a mi lado, Sam, dedicándosela a una gran amiga a la que quería un montón y a la que deseaba decirle cuanto le gustaba. Sin duda era el chico más atento del mundo, Sam se derritió al oír eso. ¿Algún día Harry llegaría a hacer algo así por mi? Claro que no tonta, el es Harry Styles y tu solo una fan más.