martes, 15 de noviembre de 2011

Gotta be you, capítulo 3

Justo en medio del salón, pude encontrarme con una guitarra española reluciente, de un color claro. Me acerque y la cogí con sumo cuidado para no romperla o dañarla. Desde pequeña, que siempre jugaba a que era una cantante famosa y solía fantasear en que era una experta de la guitarra. Cuando fui lo suficientemente responsable aprendí a tocar la y desde ese momento se había convertido en un atuendo típico en mi, y en mi billete para escapar de los problemas y disfrutar con la música. No me di cuenta de la pequeña dedicatoria que recorría la parte inferior de la madera. Pensé en un simple mensaje de mi padre pero me quede realmente sorprendida ya que no era su letra. Leí el mensaje, “Para Carolina, que disfrutes de las melodías...” hasta el momento nada era peculiar o extraño, hasta que me percaté de la firma. Un escalofrío recorrió mi cuerpo hasta el punto de pensarme en que la guitarra caería y se rompería, ¿Como lo había conseguido? ¿Que coño había hecho mi padre? Solo sabía que lo quería, que el me conocía más de lo que yo pensaba y que quería hacerme feliz. Evidentemente la guitarra estaba firmada por los chicos de one direction, con una bonita caligrafía. Dejé mis maletas y sin ni siquiera ver el resto de la casa salí al jardín, me senté en una hamaca con mi nuevo y más preciado tesoro. No podia más, necesitaba tocar urgentemente el instrumento firmado por mis ídolos, cogí mi pua con la bandera de estados unidos y rocé suavemente las cuerdas. Primero unos simples acordes y después canciones enteras. Al poco rato añadí mi voz hasta que unas palmadas me hicieron regresar a mi realidad. No sabía cuanto rato había pasado, solo que mi padre estaba apoyado en el umbral de la puerta del patio aplaudiendo con ganas. Me levanté lo abracé y lo besuqueé dándole mil gracias por ese bonito detalle que tan feliz me había hecho. Me hizo sentarme a su lado y contarle todas las novedades de mi vida, acabé rápido y me dirigí hacia mi habitación. Era un cuarto grande, pintado de color crema, con las cosas básicas. Una gran cama de matrimonio, una mesa para el estudio en la que descansaba un portátil de última generación para mi propio uso, y unos armarios muuuuuuuuuuuuy grandes en los que podía guardar mis conjuntos. 
-Ya la irás decorando a tu gusto cariño- Me dijo mi padre.
Con eso en lo único que pensaba era pósters de one direction! jajajaja, me había traído unos cuantos de España, y los utilicé para darle vida a mi nueva fortaleza. 
Al terminar de organizarlo baje al salón en el que mi padre descansaba con la televisión puesta. Me senté a su lado y cambié de canal hacia el de prensa rosa. No era ese clase de chicas pero quería oír novedades de mis 5 chicos favoritos:)
Para mi suerte no tardaron en nombrarlos, me fijé bien en las palabras de la locutora: los chicos de one direction se encuentran ahora mismo en...

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